miércoles, 24 de diciembre de 2014

Una simbiosis de montaña

La semana pasada se celebraba en Bilbao el Mendi Film Festival, en el que se hizo entrega del Eguzkilore Joya de oro a Montxo Armendaríz con la película "Tasio" en el 30 aniversario, y no es de extrañar, pues el primer galardón que recibió este film grabado en esta tierra, fue el conseguido en el festival de cine de montaña de Trento (Italia).



 La vez que mi padre decidió mostrarnos la carbonera en forma de miniatura y de alguna forma interpretativa, el oficio del carbonero, fue cuando conocí la verdadera simbiosis que existe entre el  humano y la naturaleza en este oficio.
El carbonero tenía en el monte su lugar de trabajo, ahí permanecían ellos solos con su carbonera, día y noche, días de lluvias, tormentas, luna o viento, lo que hubiera. Al igual que quien decide abrir una vía o ascender una cumbre, dormir en paredes y sufrir de frío o de agotamiento. 
Los carboneros dormían en colchones de hoja de maíz, comían, cenaban y desayunaban calbotes, patatas o habas, tocino o ranas, la lumbre era el candil y la luna llena en noches despejadas, la hora era la posición del sol y el despertador cuando la carbonera quebraba.



Mi abuelo encontró en el monte la forma de poder ayudar a la familia, era el mayor de 5 hermanos, huérfanos de padre muerto por un rayo, eso le salvó de ir a la guerra pero con 13 años tuvo que hacer de padre, aprendió el oficio y comenzaron sus primeras carboneras. 


 Y así les enseño a  sus dos únicos varones, que  acompañaron a su padre en el oficio, juntos compartían los días y las noches, preparaban la comida, la txabola y se turnaban los días de fiestas. Tras la salida de sus hijos a la mili , el padre, de nuevo se quedó solo en el monte con su carbonera y la luna llena.


Y las noches que paso al cuidado de la carbonera... pienso en mi abuelo y en sus noches en vela. 



Extracto de el diario de mi padre "Recuerdos desde 1948" 

Los pocos ingresos de la Sierra de Loquiz, carboneras, bellotas para los cerdos, se subían algunas vacas, cabras, poco de campo para pan, poco de regadío, ya en esto empezamos a ayudar los 7 hermanos. Ya empezamos mi hermano Julian y yo con 17 y 15 años. Mi padre ya encuentra con sus dos hijos ayuda, y se anima a coger un monte para hacer carbón en la cuesta de Zequiña o la fuente de Irasua a hora y media de casa. Se hablaba mucho de poca fuerza para 250.000kg de leña. Acababan las nevadas y se anima mi padre y de víspera prepara tronzador, hachas grandes y pequeñas según las fuerzas. Por la mañana el macho en la puerta con la albarda, a cargar maza, cuñas, azada para el césped y comida para toda la semana. Tocino, huevos, aceite, puchero, candil para la luz, ropa quita y pon si te mojas.
Camino para arriba por la estación. Sansevera, majadas de Legaria  y mi padre explica a mi hermano como tiene que volver porque mi padre y yo nos quedamos en la nueva casa, lugar donde más leña podía haber. El suelo allanar, dos horquillas, un gallur que había que cortar en el monte. 
No había que dormirse, pues había que dormir y mi hermano bajar a casa con el macho hora y media. El asiento una encina de la anchura de la chavola, de la puerta a la izquierda fogón, derecha cama. Colchón hoja de maíz, no se criaban pulgas. Tendrás que marchar a casa que es primer día, mañana subes pronto y tu tendrás que hacer fuego para hacer la cena y poner la legumbre a remojo.
Bueno se hace de noche, la cena ya está hecha, patatas. El sartén con dos tajadas de tocino para que echase grasa, dos cucharadas, un huevo con el tocino y las patatas, buena cena. Calbotes para almorzar, para comer y la cena. Para toda la temporada la bota no faltaba, con orden del padre éramos muy jóvenes.
Llega la mañana y pronto llega mi hermano, el tronzador bien afilado y dos hachas, comenzamos a hacer leña . Mucha por hacer pues para Noviembre tenía que ser carbón. Pues la leña contra mas seca mejor, pues empezar de un lado y rajar si hay alguna recia y ponerla de pie para que le dé bien el sol y se seque pues de 4kg de leña sale uno de carbón . Que hay que hacer la leña curiosa sin ser largos, sin sin recios, si la carbonera es de menos de 150 sacos, con el carbón nunca tranquilo, por eso el suelo llano, la carbonera bien hecha desde que se da fuego hasta que está en sacos y durante un día cuida los sacos. A todos los carboneros les han ardido las carboneras por una cosa o por otra . 
Este monte es el primero de jóvenes que hicimos al mando de nuestro padre. Ya mi hermano se va a la mili, me quedo con mi padre un monte para leña en Zurcuna otro en Zufía.